Junto a la crisis sanitaria, los hospitalizados y los fallecidos, la crisis económica por la que atraviesan miles de familias se instala como uno de los efectos más adversos que está desencadenado la pandemia del coronavirus.

El alto desempleo y la pérdida de puestos laborales decantaron en un sinnúmero de incumplimientos financieros que mantienen al límite a millones de chilenos, sobre todo a quienes viven "al día" con prácticamente nula capacidad de ahorro.

El escenario es complejo y, peor aún, los expertos advierten que esta situación podría extenderse por largo tiempo. La reactivación económica se ve lejana y es probable que continúen perdiéndose puestos laborales, tal como ocurrió en la región durante los dos últimos meses, donde 8.861 trabajadores fueron desvinculados.

Según un estudio de Chiledeudas, el 58% de los tarapaqueños dejó de pagar a cinco acreedores por efectos directos de la pandemia y la deuda en créditos de consumos promedia los 2,5 millones de pesos. El mismo estudio reveló que el 2019 la morosidad a nivel local no superaba el 30%.

En los últimos años el fácil acceso al crédito y a los productos financieros estimuló el consumo, incluso más allá de las posibilidades de pago de miles de personas. Esto no solo ocurrió en la población laboralmente activa, sino que se extendió a estudiantes y adultos mayores, pese a que estos dos últimos grupos generan pocos o nulos ingresos.

Con un desempleo que se proyecta al alza y una economía deteriorada es probable que el sobreendeudamiento aumente, con todas las complicaciones que eso acarrea a nivel personal y social.

Es importante que ante la actual situación las familias tomen todos los resguardos y eviten compras a crédito, sobre todas aquellas que generan muchos intereses. Por otro lado, es indispensable que las empresas también actúen con prudencia y entreguen instrumentos financieros de forma responsable.

Con un alto nivel de incertidumbre, es fundamental que las familias ajusten sus presupuestos y eviten gastos extras que pueden esperar hasta que la situación económica al menos se estabilice.

"El 58% de los tarapaqueños dejó de pagar a cinco acreedores por efectos directos de la pandemia".

Ante la compleja pandemia que sufrimos, que ha generado una serie de trastornos en todos los frentes, aún tenemos una tabla de salvación, la bondad, la natural inclinación de los seres humanos para hacer el bien, a través de un comportamiento virtuoso.

Claro está que de todo hay en la Viña del Señor, sin embargo en momentos de incertidumbre debe primar la comprensión, buena voluntad y empatía para encontrar una luz que conduzca al final del túnel.

Un poco de inteligencia y desprendimiento para dejar que los que tienen que estar al frente adopten las mejores decisiones, sin colocar obstáculos en el camino como lo hace parte de la clase política que anteponen sus intereses personales o partidarios por sobre la mayoría ciudadana, la que está teniendo la oportunidad de apreciar claramente, y como nunca antes, la ausencia de visión de país y de espíritu republicano de un importante grupo de los parlamentarios, que en términos coloquiales se puede traducir en que 'no han dado el ancho'. Si la pandemia se traduce en un alto costo social, también será el ocaso para muchos políticos y sus respectivos conglomerados, porque los electores aplicarán su castigo democrático a través del voto. De igual forma, estas dos últimas pestes nos ha mostrado a un país al margen de la ley, como señaló el abogado Carlos Peña, donde se ha hecho habitual el incumplimiento de las reglas por sectores de la población y, lo que es peor, de parlamentarios que han elevado a la categoría de virtud el incumplimiento de las reglas constitucionales.

¿Y por casa? Seguimos esperando que los pasajeros directorios y ejecutivos de Zofri, así como las autoridades de gobierno, entiendan que es lo que se necesita y debe hacer para enfrentar el cambiante y renovado comercio internacional, resolviendo los temas que son verdaderos nudos ciegos para un centro logístico y que tantas y reiteradas veces les hemos representado, con sus soluciones, pero donde también ha faltado la comprensión, buena voluntad y empatía para atender los planteamientos de los empresarios que hacemos zona franca.

"aún tenemos una tabla de salvación, la bondad, la natural inclinación de los humanos para hacer el bien..."

Max Barrera P., Presidente,, Asociación Usuarios Zofri A.G.1

La región venía de cuatro días seguidos con menos de 100 casos. Ayer volvió a más de 130 contagiados. Es necesario mantener las medidas restrictivas a nivel personal y colectivo, independiente de cómo evoluciona la crisis.

Estrés

Muchas personas están sufriendo los efectos de varias semanas de cuarentena. Niños, jóvenes, adultos y personas mayores sienten estrés, ansiedad o depresión. Es necesario aumentar la cobertura de la salud mental o la situación se podría poner muy compleja.

Adultos mayores

A diario adultos mayores, sobre 70 años, salen de sus casas para realizar distintos trámites sin compañía. No tienen una red de apoyo que necesitan con urgencia, por ser los más vulnerables ante un contagio de coronavirus. Hay que cuidarlos.