Ayer, una vez más, la región se quedó fuera de las que avanzaron a fase 2 del desconfinamiento y pasará, al menos, una semana más en cuarentena. Si bien muchos indicadores han bajado, el número de casos nuevos se mantienen en un borde superior a los 10 casos diarios por cada 100 mil habitantes, lo que hace difícil poder lograr el objetivo.

Si bien ayer los casos bajaron y solo llegaron a 21 nuevos contagios, esto debe mantenerse en los próximos días si es que se quiere avanzar, donde un punto de inflexión lo representan los casos asintomáticos, algo que preocupa no solo a nivel local sino también nacional e internacionalmente.

Los estudios reconocidos por la OMS, dicen que si bien los asintomáticos tienen una carga viral mucho menor y logran contagiar un 42% menos que un sintomático, representan un gran peligro al no ser detectados, lo que de paso le otorga mayor relevancia a la búsqueda activa.

Uno de los grandes problemas es que, según las investigaciones relacionadas al Sars Cov-2, alrededor del 30% de los adultos y un 40% de los niños serían asintomáticos, donde independiente de que no tengan el nivel de contagio de una persona con síntomas, cuando estos no guardan el distanciamiento social su efecto es mayor en la propagación del virus, lo que se traduce en que los casos se mantengan altos.

Sin dudas es la investigación epidemiológica y los testeos activos los que deben hacer la diferencia para poder ir controlando el contagio y evitar que los casos se vayan propagando sin información de donde ocurrió, lo que se transforma en un círculo vicioso.

Actualmente, independiente de que los casos hayan bajado, sigue una gran ocupación de camas hospitalarias, tanto en centros clínicos públicos, privados, como también en el estadio regional, lo que es un indicador que aún falta mucho para que el virus esté bajo control.

La única forma de controlar este virus es que todos cumplamos las medidas de prevención, no solo el uso de mascarilla, sino el recambio frecuente de esta, el lavado de manos, evitar tocar superficies de uso público y sobre todo mantener la distancia en la calle. Todos podemos ser un potencial asintomático, es mejor cuidarse y cuidar al resto.

"La única forma de controlar este virus es que todos cumplamos las medidas de prevención".

El sistema de financiamiento de la educación superior en Chile está viviendo días complejos. Sumado a su histórica situación de permanente crisis y cuestionamientos de modelo que a nadie parece acomodar, se le agregó la variable pandemia.

Producto de esto último, el sistema se ha visto amenazado, incluso las instituciones privadas, por la evidente caída en las matrículas, deserción y morosidad en el pago. Situaciones que pusieron en evidencia a un sistema frágil, que durante décadas ha promovido un modelo de autofinanciamiento, de competencia por recursos y que depende en gran medida de los ingresos por aranceles de docencia. Un sistema que invita a dejar de lado otros desafíos importantes como la vinculación con el territorio, el rol social, ofertas de carreras mal llamadas no rentables y la generación de conocimiento por estar preocupados de la viabilidad financiera.

La llegada de la gratuidad pudo traer solución a muchas y muchos estudiantes, pero no a todos y adicionalmente, puso en una situación financiera muy compleja a las instituciones acogidas a ella, debiendo asumir nuevas obligaciones de alto costo, muy cuestionadas.

Un nuevo actor que se viene a sumar, son los llamados aranceles regulados, que han puesto a las agrupaciones de universidades existentes a cuestionarlos y a estar en estado de alerta por considerar de alta amenaza e impacto en los ingresos de las instituciones, con parámetros que no son compartidos y que están siendo analizados por una comisión de expertos, encendiendo las alarmas del parlamento.

Se requiere ahora una discusión país sobre lo que se espera de las universidades y en forma muy particular de las estatales regionales, y si Chile está dispuesto a apoyarlas para su sustentación y roles de futuro. No todo es viabilidad, no todo debe ser rentabilidad, pues la educación es una verdadera llave maestra para la movilidad social.

"La gratuidad pudo traer solución a muchas y muchos estudiantes, pero no a todos y adicionalmente, puso en una situación financiera muy compleja a las instituciones".

Alberto Martínez,, rector Universidad Arturo Prat

Aunque cada días es más difícil controlar la cuarentena, donde las personas ya saben como burlarla, es necesario reforzar los controles este fin de semana. Hay que sumar fuerza para salir y no para perpetuarse en ella.

Viajes al interior

Ya muchos están viajando a pueblos del interior a pasar las Fiestas Patrias. Si se quiere hacer un buen control, los puntos deberían estar dispuestos desde ya en los distintos controles y ser muchos más incisivos. Varios andan con certificados de residencia falsificados.

Sin claridad

El CDI desde que regresó al torneo ha sido menos que sus rivales. Pero ayer fue el ejemplo más claro de un equipo con un plan insuficiente para pelear cosas importantes. Para seguir en la elite del fútbol chileno hay que considerar que el margen de error es angosto.