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Médico de la UCI del hospital: "Es el desafío profesional más grande que he tenido"

El doctor Álvaro Salinas habla de su experiencia ante la pandemia y los costos personales que ha generado duplicar su tiempo laboral.
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Patricio Iglesias P.

P ara el doctor Álvaro Salinas Espinoza, de 40 años, cirujano internista en la UCI del Hospital Regional Dr. Ernesto Torres Galdames, el año 2020 difícilmente se le va a olvidar.

Este no solo estuvo marcado por la pandemia, sino por un fuerte desafío profesional y humano, donde prácticamente estuvo tres meses sin tener contacto con su esposa y dos hijas a causa de la pandemia y los estragos que produjo en la región, con más de 200 víctimas fatales y a partir desde cero con una enfermedad desconocida, que en principio se veía distante, pero que se tornó muy real los primeros meses de 2020.

Por su entrega, los integrantes del Colegio Médico filial Iquique valoraron su trabajo, considerando que hoy se celebra el Día el Médico, una fecha que sin embargo el galeno hace ostensible a todo el equipo de salud del hospital, que trabajó unido ante una crisis sanitaria.

Salinas lleva 15 años ejerciendo la profesión médica. Su primera estadía en Iquique en el Hospital fue de 2007 a 2010, donde hizo una beca con auspicio del centro médico y regresó en 2014, como médico internista en la Unidad de Pacientes Críticos.

¿Qué ha significado la pandemia en términos profesionales?

-Para todo el equipo y para mí esta pandemia es el desafío profesional más grande que he tenido. Significó aumentar con la dirección del hospital y la jefatura de la UCI el número de camas críticas, que pasamos de 8 a 50 y duplicar turnos. Los primeros meses aislarnos de nuestras propias familias por el miedo al contagio, aprender de la enfermedad con horas de estudio fuera de nuestro horario laboral.

¿Cómo valora el trabajo de la UCI en la pandemia?

-La gran prueba fue someter la UCI a su máxima capacidad ante la enfermedad. "Ha sido un desafío, porque fue un esfuerzo, lo más duro fue la cantidad de personas que tenían comprometida su salud y lo difícil que es manejar a estos pacientes, lo prolongado de su terapia intensiva y lo dificultoso de su recuperación total. El Covid ah sido catastrófico en términos de mortalidad y de daño pulmonar establecido y mucho drama humano, al comprometerse el equipo con pacientes donde no están sus familiares día a día y no pueden visitarlos. El equipo hizo un vínculo emocional con los pacientes y sus familias.

¿Cuál ha sido el costo personal en esta crisis?

-Soy casado y tengo dos niñas chicas. El costo personal ha sido alto, tanto para mí y mis compañeros significó duplicar la carga laboral, estar conectado en los días de descanso y mucho tiempo estuve aislado de mi señora y de las niñas, estuve tres meses aislados de ellos.

¿Cuáles fueron los meses más críticos para usted y su equipo?

-Junio y agosto fueron lo meses más álgidos por la carga asistencial, el número de pacientes que recibimos, en especial graves y aquí quiero destacar el equipo de medicina del hospital, que nos brindó una ayuda en manejar pacientes en cánulas, que nos permitió priorizar a nuestros pacientes críticos, dándonos un respiro.

¿Están mejor preparados los equipos médicos para afrontar una "segunda ola" de contagios?

-En términos de conocimiento, se ha avanzado entorno a esta enfermedad. Y hemos podido definir aspectos del punto de vista clínico y médico. Pero más allá de las camas clínicas, el llamado es a la población. Si las personas son responsables y mantienen las medidas de lavado de manos, uso de mascarilla y distanciamiento social, y los casos los podemos controlar, nos permite tener la posibilidad de absorber la demanda de pacientes críticos. Si no existe ese cuidado se desborda la demanda y no queremos que el hospital colapse en términos de no recibir la cantidad de gente que requiere. Nosotros alcanzamos a montar sobre 50 camas críticas en el peak de la enfermedad, escenario que no queremos repetir. Son 200 vidas perdidas para sus familiares y el equipo que ha visto partir a esos pacientes.

Trabajo en equipo

El doctor asegura que lo avanzado como equipo es un factor clave: "Esta pandemia fortaleció el trabajo con los demás profesionales. Con kinesiólogos, en terapia ventilatoria, las enfermeras y técnicos paramédicos que se han lucido. Destaco lo cohesionado que hemos funcionado como equipo. Una de las satisfacciones en esta desgracia que es la pandemia, es el trabajo del personal. El trabajo ha sido una comunión".

50 pacientes críticos en UCI, en los meses de junio-agosto, fue el mayor desafío para el profesional y su equipo.

Tarapacá sumó ocho casos de Covid y los activos bajan a 225

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La región de Tarapacá registró ayer ocho casos de Covid-19, una cifra bastante menor a los que venía registrando los últimos días con 35, 28, 17 y 38, 47 y 55 contagios hasta el 27 de noviembre. El acumulado de contagiados desde marzo subió a 13.919.

Los casos activos en la región bajaron de 262 a 225, acercándose a lo que pide la autoridad sanitaria para pasar a la fase tres del plan "Paso a paso". El número de fallecidos se mantuvo en 258 decesos.

La Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Regional cuenta con 10 pacientes en estado crítico, lo que equivale al 1,44% de los internados en los hospitales de Chile por el Covid-19. El total es de 694.

Mientras que 1.398 personas se encuentran cumpliendo cuarentena en residencias sanitarias.