La esperanza de la vacuna
El 3 de marzo en el Hospital de Talca se confirmó el primer caso de Covid-19 en Chile. Más de nueve meses han pasado desde aquel día, tiempo en que el país ha transitado por un complejo e incierto camino no solo desde el punto de vista sanitario, sino que también económico y social.
Con 16 mil víctimas fatales, más de medio millón de contagios acumulados e históricas cifras de desempleo, el panorama de 2020 ha sido más que difícil, sobre todo para las miles de familias que vieron partir a un ser querido o se han enfrentado cara a cara con la cesantía. Muchos incluso experimentaron ambas situaciones.
Por eso, la aprobación de la vacuna Pfizer y el anuncio del arribo de las primeras 20 mil dosis que serán distribuidas entre la población objetivo antes de fin de año, se instalan como una verdadera luz de esperanza en medio de tantos problemas.
Además, de acuerdo a la información entregada esta semana por el Presidente Sebastián Piñera, el Gobierno está materializando acuerdos y contratos que garantizan 10 millones de dosis con el Laboratorio Pfizer-Biontech, 10 millones de dosis con el Laboratorio Sinovac, lo que sumado a los acuerdos con los Laboratorios AstraZeneca-Oxford, Jensen - Johnsson & Johnsson y la Alianza Covax, permitirían a Chile contar con unas 30 millones de dosis.
"Los contratos suscritos nos permitirían distribuir durante el primer semestre del próximo año 20 millones de dosis de vacunas, sujeto a las aprobaciones nacionales e internacionales, y a la capacidad de entrega de los laboratorios", precisó el Mandatario.
Sin embargo, es importante tener presente que el proceso de inoculación será bastante extenso, por lo que de ningún modo se deben relajar las medidas sanitarias recomendadas por la autoridad y los especialistas. En ese contexto, es clave recordar que la única herramienta efectiva hoy es el autocuidado, el que incluye acciones tan simples como mantener el distanciamiento físico, utilizar mascarillas y lavarse continuamente las manos.
Mientras llega la vacuna, los tarapaqueños deben comprometerse con la prevención y así evitar que la región siga como una de las más afectadas por el confinamiento. Es momento de ser prudentes.
"Es importante tener presente que el proceso de inoculación será bastante extenso".