Cuarentena de enero sumó más sumarios que 2020
Seremi de Salud adjudicó las cifras a un aumento en el número de fiscalizadores. El 57% se inició este año.
Más de la mitad de los sumarios sanitarios realizados al comercio y locales de venta de alimentos se han hecho en las últimas semanas. Según cifras de la Secretaría Regional Ministerial de Salud de Tarapacá, en febrero (hasta ayer) se han realizado 1.142 fiscalizaciones y 122 sumarios sanitarios, mientras que en todo enero se reportaron 1.683 inspecciones y 373 sumarios.
Esto suma 495 procesos administrativos, lo que representa casi la mitad del total acumulado desde el año pasado a la fecha. La Seremi de Salud evidenció que la cifra desde mayo de 2020 es de 15.076 fiscalizaciones y 861 sumarios. Es decir, el 57% de los procesos de investigación sanitaria se iniciaron los dos primeros meses de 2021, cuando Iquique y Alto Hospicio estaban en cuarentena (del 4 de enero al 15 de febrero).
El seremi de Salud, Manuel Fernández, explicó que estas cifras se deben al aumento en el número de fiscalizadores a nivel regional.
La autoridad sanitaria reconoció que la Seremi de Salud ha incorporado nuevos equipos de inspección, lo que ha optimizado el despliegue territorial y la capacidad de supervisar a los locatarios de la zona.
"Uno de los factores que incide en el aumento de los sumarios sanitarios, sin duda, es la mayor capacidad fiscalizadora, al aumentar la dotación, además de la experiencia adquirida durante la pandemia, lo que ha permitido mayor detección de incumplimientos. En las fiscalizaciones apuntamos fundamentalmente al cumplimiento de toda la normativa establecida para controlar la situación epidemiológica de las distintas comunas", detalló el seremi de Salud.
Fernández agregó que otro factor importante resultó ser el confinamiento que vivieron las comunas urbanas de Tarapacá, en especial la fiscalización al comercio no esencial, cuyo funcionamiento está prohibido en cuarentena.
DOBLE inspección
A pesar de este aumento en el número de fiscalizadores, el presidente de la Cámara de Comercio de Pozo Almonte, Ernesto Maluenda, denunció el fin de semana pasado una supuesta sanción arbitraria por parte de fiscalizadores en el local "Torito Bravo" que vende comida rápida en calle Comercio.
"Tuvimos una situación bastante complicada con un negocio que fue fiscalizado hace 20 días, cuando se exigió una serie de mejoras en la cocina. Entonces estuvieron haciendo los trabajos y, por consiguiente, estaba la puerta abierta hacia la calle, pero llegaron dos fiscalizadores indicando que no podían tener abierto, es decir, no podían hacer las reparaciones en el local, en circunstancias de que los mismos fiscalizadores las exigieron. Es un abuso, porque además se extendió un parte", acusó.
Sobre este caso, la Seremi de Salud precisó que cuando la autoridad sanitaria efectúa una fiscalización y detecta que existen deficiencias, infracciones a la normativa o incumplimientos a las instrucciones dadas, por ejemplo, a través de la prohibición de funcionamiento, "todo infractor puede presentar descargos, los que son considerados al momento de dictar la sanción, pudiéndose acoger en un 100% y, por lo tanto, sobreseyéndose el sumario o en su defecto, aplicar la multa de acuerdo al tipo y gravedad de la infracción".
861 sumarios se iniciaron desde mayo hasta ayer. De estos, 495 corresponden a enero y febrero.