Crisis migratoria
Sin lugar a dudas, desde que se realizó el refuerzo de los controles fronterizos, ante el llamado Plan Colchane, el número de migrantes irregulares se ha reducido notablemente.
Si bien es algo que no se detuvo y no se detendrá del todo -y de eso están claros los organismos internacionales, que conocen bien la situación crítica que viven países como Venezuela y otros de Hispanoamérica- el escenario claramente ha tenido una baja incluso por debajo de lo que sucedía en septiembre del año pasado, cuando el movimiento partió en la zona altiplánica.
Por lo anterior, es importante que se puedan aumentar las gestiones internacionales para poder ayudar a paliar la migración de modo que se pueda hacer por los conductos regulares, como Chile quiere, de lo contrario la tan anunciada normativa es letra muerta.
Aunque el covid ha generado condiciones muy complejas con medidas polémicas y de escasa efectividad como el cierre de fronteras, la realidad indica que de poco sirven en un mundo globalizado donde el intercambio comercial se va a seguir dando y donde cualquier virus de igual modo llegará a cada rincón del planeta.
Por tal motivo, está claro que la migración es un fenómeno social que seguirá ocurriendo y donde se debe asumir con la institucionalidad necesaria, la cual ha sido fortalecida con la última ley, pero también con medidas especiales en medio de una pandemia que impide que esto se realice en las condiciones establecidas.
En este sentido, sin asumir una política promigración, es importante que se puedan fortalecer la información respecto a estos procesos y desacreditar los mitos que surgen frente a esta y que solo llevan a males como el racismo o la xenofobia.
Por otro lado, el control fronterizo que realizan Carabineros y el Ejército, debe ir acompañado de apoyo en infraestructura sanitaria y la logística que permita evitar al máximo tragedias como las que se han dado, con seis personas fallecidas durante este año y muchas otras en graves condiciones de salud que han llegado al consultorio rural de Colchane.
"Está claro que la migración es un fenómeno social que seguirá ocurriendo y donde se debe asumir con la institucionalidad necesaria".