Esta semana, a través de las páginas de este Diario, algunos vecinos del sector sur dieron cuenta -una vez más- de un problema que se arrastra por años: el mal estado de las calles y los peligrosos baches que exhibe el pavimento en distintos sectores de Iquique.

Si bien el lógico paso del tiempo genera un evidente desgaste de la infraestructura pública, es deber de la comunidad denunciar los problemas y de las autoridades generar las instancias para buscar las mejores soluciones. Lamentablemente, la poca claridad respecto a las competencias de los distintos organismos públicos, muchas veces termina por provocar una especie de inacción que solo perjudica a los pobladores.

Pero más allá del debate y los argumentos que puedan entregar los servicios respecto a sus obligaciones, lo cierto es que existe un problema que no ha sido resuelto y que demanda -de acuerdo a lo expresado por los pobladores- de una solución concreta y oportuna.

Aunque se han ejecutado proyectos de mejoras para las vías urbanas, distintas avenidas, calles y pasajes lucen un aspecto desmejorado y hasta peligroso, toda vez que -a las malas condiciones del pavimento- se suma la alta circulación de vehículos y la conducción poco responsable de algunos automovilistas. Todo lo anterior solo termina por incrementar las probabilidades de un accidente, con las consecuencias humanas y materiales que eso incluye.

Es evidente que las calles de Iquique necesitan una intervención mucho más integral y profunda, sobre todo porque cuando se realizan reparaciones parciales, los baches suelen reaparecer y hasta aumentan en superficie y profundidad.

Es importante, entonces, que las instituciones públicas generen más y mejores instancias de comunicación vecinal y, a través de un trabajo colaborativo, busquen la manera más adecuada de abordar los requerimientos de la ciudadanía, partiendo por brindar la orientación necesaria para agilizar los temas.

Se espera, entonces, que la discusión técnica pueda decantar en una solución concreta para los afectados.

"Es evidente que las calles de Iquique necesitan una intervención mucho más integral y profunda".

El 25 de julio de 1979, un grupo de empresarios creó la Asociación de Usuarios Zofri A.G.1. fundando las bases de una de las agrupaciones gremiales más importantes de Tarapacá, cuyo principal objetivo es proteger las actividades comerciales, promover el desarrollo y velar por sus asociados. Tuve la suerte de integrarme a la AUZ en marzo de 1980.

Muchos directivos de la Asociación de Usuarios Zofri imprimieron su sello para forjar el Centro de Comercio Exterior que más valor a dado a Iquique y generado miles de empleos, pero varios ya no vieron cumplido el sueño de zafar del centralismo ejercido en contra del sistema franco, que se hizo más fuerte cuando pasó a ser dirigido por Corfo en los 90. El retorno a la democracia y la política impidió que Zofri fuera dirigida localmente, frenando las experiencias, las capacidades y los anhelos de la comunidad local.

Su aporte como palanca de desarrollo es innegable. No solo impulsó el comercio exterior, sino que colaboró estrechamente para crear empleo en numerosos frentes productivos, abrió caminos a todo el mundo; ayudó a la creación de universidades y creó un estilo de vida diferente en Iquique y sus comunas vecinas. Está claro que desde hace 46 años Zofri marca el ritmo de Iquique.

En cuanto al aporte de los empresarios Zofri se puede decir fehacientemente que son ellos quienes sumaron una serie de logros, que podrían haber sido mayores si el Estado de Chile los hubiera dejado ser dueños de su propio destino.

Un hito que refleja la calidad gremial y señera de esta asociación de la Zofri, es que posee la sigla A.G.1 que indica el número 1 del registro nacional de asociaciones gremiales.

Grandes dirigentes que aportaron su experiencia ya no están con nosotros y es un deber nuestro recordarlos en su trabajo en favor de Iquique y Tarapacá como Leopoldo Bailac C., Manuel Carpintero, Tomás Tuset, Jorge Santibáñez, Enrique Lombardi, Pedro Henríquez y Manuel Grinspun. También recordamos queridos colaboradores como Iván Seisdedos y Osvaldo Torres. También el aporte hasta hoy en Gabriel Abusleme, Hugo Macchiavello, Amin Sade, Leonardo Solari, Giorgio Macchiavello y Felipe Illanes, entre otros.

"Muchos directivos de la Asociación de Usuarios Zofri imprimieron su sello para forjar el Centro de Comercio Exterior".

Max Barrera Perret,, presidente Asociación, Usuarios Zofri A.G.1.

Aunque bajaron los contagios, y las unidades criticas de los establecimientos de salud están con más holgura, es importante mantener las medidas de autocuidado para evitar rebrotes. No hay que arriesgarse.

Fragata portuguesa

La autoridad decidió reabrir la playa Cavancha para el baño, luego que en la semana se detectó presencia de algunos ejemplares de fragata portuguesa. Pese a todo, el llamado es a tener cuidado y evitar cualquier accidente que ponga en riesgo la salud.

Velocidad

La avenida Arturo Prat, en toda su extensión, es una vía urbana, por lo tanto existen límites de velocidad que en ningún caso se asemejan a los permitidos en las carreteras. Es importante que los conductores eviten sobrepasarlos, ya que se eleva el riesgo de accidente.