Chile no merece ser refundado
Una palabra que hemos venido escuchando hace rato es "Refundar", hay sectores políticos que quieren refundar las policías, pero quieren en el fondo refundar todo, Chile. No se necesita grandes estudios, conocimientos o capacidades para darse cuenta del error y la gravedad que llevan implícitas estas afirmaciones, solo se necesita un poco de sentido común- muchas veces el menos común de los sentidos- para entender que Chile requiere cambios, pero no ser refundado.
La real academia de la lengua define refundar como revisar la marcha de una entidad o institución, para hacerla volver a sus principios originales. Claramente un país no puede ser refundado, no puede volver a su origen y olvidar toda su historia, cultura, tradiciones y a sus ciudadanos. Esa historia es la esencia de todo país y debe ser reconocida, debemos sentirnos orgullosos de ella, aprender de la misma y de sus errores, pero no puedes borrar y querer que un país parta de cero, eso es ser irresponsable y no querer a tu Patria, no respetar el esfuerzo, trabajo e incluso la vida de muchos que la dieron defendiendo a nuestro país y a su gente a lo largo de los años que llevamos de República. Es una idea perturbadora, populista y expresada por generaciones que no logran entender como se construye una Nación, una Patria, que solo el amor, el respeto a ella, a su gente nos permitirá crecer como país y avanzar a los cambios que se requieren.
Alguien que quiera refundar Chile y, que más aún, valide la violencia como método de hacer política para lograr sus objetivos no puede querer ni respetar a su Patria, solo busca un mezquino interés político individual que es obtener el poder. Busca el poder, no para beneficios colectivos y llegar a acuerdos, no para hacer en paz y en tranquilidad los cambios que se requieran para las personas más vulnerables, aquella clase media que se esfuerza cada día para y por el bien de su familia.
Aquellos que sostienen que hay que refundar Chile, en definitiva, buscan imponer sus ideologías a través de cambios extremos, sin interesarles representar a todos, sino que solo a aquellos que piensan como ellos. Querer refundar Chile está lejos de lo que una inmensa mayoría de chilenos esperan, quieren y necesitan; lleva aparejado odio y divisiones, sed de venganza, un país en que la justicia se transforme en venganza.
Debemos sentirnos orgullosos de nuestro país, su historia y su gente; de los errores cometidos a lo largo de nuestra historia debemos aprender y no borrarlos, el hacerlo haría que los volviéramos a cometer. Los invito a sentirse orgullosos de nuestro país, a defenderlo y a seguir aportando para que los cambios que se requieren se hagan, pero se hagan con todos y en paz, sin odio y con la profunda convicción de que ningún chileno sobra y que la única manera de avanzar es con respeto y amor a nuestra Patria.
"Claramente un país no puede ser refundado, no puede volver a su origen".
Luz Ebensperger,, senadora por Tarapacá