Tras la primera jornada de operativos preventivos, luego de los anuncios de mayor despliegue policial por parte del ministro del Interior, Rodrigo Delgado, la PDI logró incautar más de 100 kilos de drogas.

La acción sirve para graficar la importancia de las acciones preventivas, independiente de que estas recaigan más en Carabineros que en la Policía de Investigaciones.

Ante la falta de contingente que muchas veces presenta la policía uniformada, este trabajo conjunto podría potenciarse de manera más frecuente y no solo en el marco de este plan de seguridad, ya que la mayor presencia de efectivos se traduce en un aumento de la sensación de seguridad, que hoy tanto demanda la población.

Delitos como el tráfico de drogas son una preocupación constante y por lo general su acción se detecta a través de extensas investigaciones, no obstante, la incautación realizada ayer da cuenta que mediante los patrullajes focalizados y sorpresivos también es posible combatir a estas organizaciones y a otras bandas delictuales que aprovechan cualquier situación para actuar.

La intención del gobierno es mantener este plan hasta el término de su gestión, que se cumple el 11 de marzo, pero sería interesante que se puedan generar las coordinaciones para mantener estos operativos mientras sea necesario.

Al mismo tiempo, también es de relevancia que los gobiernos locales puedan dar preferencia a proyectos que busquen mejorar la seguridad de los vecinos, donde ya hay una cartera predefinida de parte del Gobierno Regional, que decidió echar pie a tras con el retiro de este tipo de iniciativas al inicio de su mandato, cuando se buscó priorizar iniciativas de carácter social.

Independiente de lo anterior, la experiencia indica que para combatir los ilícitos no solo se requiere de más personal y tecnología policial, sino que es necesario generar proyectos que permitan recuperar los espacios públicos, hacerlos cada vez más armónicos y seguros, de modo que el uso ciudadano termine por desplazar a la delincuencia.

La actual crisis puede ser un buen momento para pensar en una ciudad segura y más acogedora, pero de fondo y no solo a través de conceptos como "smart city", que lucen pomposos, pero están lejos de la realidad local.

"Sería interesante que se puedan generar las coordinaciones para mantener estos operativos mientras sea necesario".

A veces la memoria colectiva es frágil y puede guardar bajo llaves en sus cofres del tiempo a periodos y acontecimientos muy relevantes. Uno de esos periodos y acontecimientos fue el ciclo de la plata con todo el quehacer de una sociedad minera que desafió al desierto durante la colonia. El ciclo de la plata caracterizó al siglo XVIII tarapaqueño al transformarse en su principal riqueza.

Tarapacá tuvo varios centros mineros argentíferos como Santa Rosa y del Carmen, pero por lejos el más importante fue Huantajaya; y es el que nos interesa en este momento. Huantajaya tuvo muchas minas o estacas, algunas con gran fama como las minas de nuestra Señora de la Concepción, de la Santísima Trinidad, Vieja de la familia de la Fuente, de su Majestad, nuestra Señora de Chacacoto, del Alto San Simón, de la Quebrada, mina de la Cata, etc.

Huantajaya estuvo estrechamente relacionada con la Caja Real de Carangas (Oruro) a donde los mineros enviaban su producción de plata, siendo testigos de los más importantes acontecimientos relacionados con la sublevación indígena de 1781, que afectaría a toda la economía colonial. Huantajaya inició su decadencia con el amanecer del siglo XIX, pero la perseverancia de los mineros permitió que su producción se extendiera hasta la llegada del siglo XX. Las familias tarapaqueñas y los gremios mineros se negaban a aceptar que los ricos cerros San Simón y San Agustín ya no entregarían más sus papas de plata. Por ello, es posible observar que durante todo el siglo XIX hubo reiteradas peticiones de minas en despueble para ser explotadas. Hemos encontrado en los carteles de minería de la época peruana a cónsules chilenos como Demetrio Figueroa Marcoleta y David Mac Iver Rodríguez solicitando minas en Huantajaya.

El 12 de agosto de 2020 finalmente el asentamiento minero de Huantajaya fue declarado Monumento Histórico por el Consejo de Monumentos Nacionales, corrigiendo una omisión inexplicable considerando la importancia del sitio. Lo anterior se une a la iniciativa que un equipo multidisciplinario asociado a la universidad de Tarapacá está llevando adelante -a través de un proyecto FIC denominado "Huantajaya: difusión y rescate del patrimonio platero regional"- la que abrirá los cofres del tiempo y pondrá en valor a este relevante centro minero colonial y republicano.

"Huantajaya tuvo muchas minas o estacas, algunas con gran fama".

Sergio González Miranda,, Premio Nacional de Historia 2014

A solo 10 días que comience el torneo de Ascenso los desafíos son importantes para Deportes Iquique y para ello se requiere comenzar con el pie derecho. Cada punto vale oro a la hora de ganarse un cupo para subir.

Recambio de turistas

Febrero es un mes que tradicionalmente los chilenos utilizan para sus vacaciones y para moverse dentro del país. Ojalá que todo el revuelo por la crisis migratoria y la inseguridad no afecten más al turismo y que el gran despliegue policial permita que la gente arribe.

Lobito

Al menos para evitar que se generen problemas con los bañistas que llegan a playa Lobito, sería importante tener un punto fijo de Carabineros en el sector. Quienes pernoctan en el albergue ya han generado algunos inconvenientes. También se necesita control.