Las consecuencias de la guerra en Ucrania junto con las acciones económicas a Rusia han puesto un escenario económico incierto para el mundo. Uno de los principales impactos ya reconocidos es el que se está registrando en los precios del petróleo que, por tratarse de un combustible base para bencinas, parafinas y otros insumos, sus alzas tienen impactos en una serie de productos y servicios de manera transversal.

Es por eso que la Agencia Internacional de Energía presentó hace unos días una serie de propuestas destinadas a reducir el consumo de petróleo. Se trata de 10 medidas que, a juicio del organismo, lograrían reducir la demanda hasta en dos, 7 millones de barriles al día, en un periodo de cuatro meses.

Entre estas propuestas se encuentra en reducir el límite de velocidad en las autopistas. Promover el teletrabajo desde las casas a tres días a la semana, en cuanto sea posible. Promover los días domingo sin automóviles en las ciudades.

Bajar el precio del transporte público, promover el desplazamiento a pie o en bicicleta. Aplicar la circulación alterna, es decir día por medio, en las carreteras de acceso a las grandes ciudades. Promover el uso del automóvil compartido junto con las prácticas de eficiencia energética al manejar.

Hacer más eficiente la gestión y conducción en camiones y vehículos de logística. Incentivar los viajes en tren en países donde se puede, antes que usar el avión. Además, prohibir los viajes de negocios en avión cuando existen transportes alternativos. Y finalmente reforzar la transición hacia el uso de vehículos eléctricos u otros que sean más eficientes.

Cuando se observan estas propuestas, y vemos la realidad que tenemos en Iquique, podemos decir que vivimos en una ciudad que es la antítesis de todos estos postulados, ya que no nos caracterizamos por la eficiencia en el consumo de combustible, energía y, por sobre todo, el cuidado del medio ambiente.

Por lo pronto, será el alto precio de los combustibles lo que podría obligar a muchos iquiqueños buscar maneras más eficientes y económicas de poder desplazarse en una ciudad como la nuestra, que tiene la venta de no ser una gran urbe.

"Será el alto precio de los combustibles lo que podría obligar a muchos iquiqueños buscar maneras eficientes de traslado".

Cuando llegué al gobierno regional, me reuní con el delegado presidencial, el alcalde de Alto Hospicio y el seremi del Minvu del gobierno anterior, y evidencié los problemas de desarrollo del Plan Socavones, los cuales también constaté con dirigentes sociales y vecinales.

Por eso, luego de perder cuatro años para enfrentar uno de los problemas más graves que vive la comuna, tenemos la esperanza que, con este nuevo gobierno, podremos avanzar en una de las demandas que más preocupación nos genera y que es, precisamente, la reconstrucción de las viviendas que han resultado dañadas por estos socavones.

Es en ese contexto, es que nos reunimos con el ministro de Vivienda, con la ministra de Desarrollo Social y el subsecretario de Desarrollo Social para activar el mejoramiento del actual Plan Socavones, suscrito en octubre de 2019, para así dar solución a las viviendas afectadas por estos hundimientos de terreno. Con ello, realizar un estudio de las características que limitan la posibilidad de construcción en Alto Hospicio. Cuestión que, contamos con todo el apoyo del ministro y comenzaremos a trabajar desde la región.

Además, solicité considerar un convenio entre la empresa sanitaria Aguas del Altiplano, el Minvu y el gobierno regional, solicitud que fue planteada al subsecretario de Subdere, Miguel Crispi.

No fue una reunión para conocer las expectativas del ministerio y cuáles son nuestros requerimientos, fue una reunión de urgencia, porque hemos estado mucho tiempo esperando una respuesta real y eficiente a problemáticas que hoy tienen a familias viviendo en riesgo. Nos hacemos cargo de algo, que lamentablemente, no se enfrentó con seriedad, y que deberemos modificar y actuar en conjunto con las nuevas autoridades para cumplir con la ciudadanía.

Estamos muy preocupados y esa preocupación la canalizaremos en buscar una solución definitiva y estamos seguros que contaremos con el apoyo de la autoridad desde nivel central para dar real solución a las familias de la comuna.

"Estamos muy preocupados y esa preocupación la canalizaremos en buscar una solución definitiva".

José Miguel Carvajal,, gobernador de Tarapacá

Lamentablemente ya se ha hecho costumbre en la ciudad ver algunas obras de impacto ciudadano a medio terminar, con eternas pruebas y testeos, pero sin una fecha de inauguración clara. Sería bueno agilizar estos procesos.

Conservar la calma

Es alarmante ver que a partir de marzo, y con esta vuelta a la "normalidad" prepandemia, hay personas que andan estresadas en la vía pública con una violencia anormal. Pese a que hay obligaciones impostergables, siempre es bueno conservar la calma.

Falta de transporte

Una de las nuevas realidades que han enfrentado los estudiantes es la falta de locomoción pública en Iquique y Alto Hospicio, sobre todo para los estudiantes vespertinos. Es importante que exista una premura por parte de las autoridades en dar solución a los alumnos.