Insistir en la inclusión
En diciembre de 2011, la Asamblea General designó el 21 de marzo Día Mundial del Síndrome de Down. Con esta celebración, la ONU busca generar una mayor conciencia pública sobre la cuestión y recordar la dignidad inherente, la valía y las valiosas contribuciones de las personas con discapacidad intelectual como promotores del bienestar y de la diversidad de sus comunidades. Además de resaltar la importancia de su autonomía e independencia individual, en particular la libertad de tomar sus propias decisiones.
Esta semana los establecimientos educacionales de toda la región lo recordaron con diversas actividades que pretenden hacer conciencia y por sobre todo dar importancia a valores como la tolerancia, la no discriminación y la integración social de las personas con capacidades diferentes.
La incidencia estimada del síndrome de Down a nivel mundial se sitúa entre 1 de cada 1.000 y 1 de cada 1.100 recién nacidos y suelen presentar más problemas de salud en general, sin embargo, los avances sociales y médicos han conseguido mejorar la calidad de vida y aunque a principios del siglo XX, se esperaba que los afectados vivieran menos de 10 años, ahora, cerca del 80% de los adultos superan la edad de los 50 años.
Este año la conmemoración se enfocó en el significado de la palabra inclusión, una oportunidad única para fortalecer las ideas de una sociedad que avance hacia ella.
Estas fechas permiten hacer conciencia en la sociedad respecto a la importancia de las diferencias y, sobre todo, que desde la más temprana edad los niños puedan entenderlas y asumirlas con naturalidad, sin que estas sean trabas para la convivencia humana.
Muchos de los conflictos de la humanidad tienen su origen en la falta de tolerancia, egoísmo y ambiciones de los seres humanos y, por difícil que parezca, es importante que cada ciudadano pueda aportar para luchar contra estos antivalores.
El trabajo con las nuevas generaciones es esencial para apuntar a una sociedad más justa y donde la inclusión sea parte importante de los objetivos que se tracen hacia el futuro.
"El trabajo con las nuevas generaciones es esencial para apuntar a una sociedad más justa".