Frenar la violencia escolar
La considerable baja en los contagios de coronavirus y el avance de la vacunación en distintos grupos de la sociedad permitieron que marzo marcara un antes y un después respecto a las medidas sanitarias destinadas a combatir la pandemia.
Los positivos números reportados durante los últimos dos meses decantaron en una marcada tendencia a normalizar las más diversas actividades. Tras dos años de fuertes restricciones de movilidad, los trabajadores volvieron a ocupar de forma masiva sus instalaciones y los estudiantes las salas de clases. Sin embargo, este retorno también está evidenciando distintas problemáticas en la conducta de los seres humanos, situación que cobraría sentido tras largos y agotadores meses donde se convivió con el dolor de la pérdida, el temor a los contagios y la angustia económica, entre tantas otras emociones.
En ese sentido, la educación parece convertirse hoy por hoy en uno de los sectores más golpeados y donde están recrudeciendo con fuerza episodio de violencia entre pares.
Ante este complejo escenario, que por cierto también se ha registrado en establecimientos educacionales de Tarapacá, el Ministerio de Educación lanzó la primera semana de abril la "Estrategia de Bienestar y Convivencia", iniciativa que apunta a reducir las situaciones de violencia que mantienen en alerta a las comunidades. De acuerdo a lo expresado por el jefe de esa cartera, Marco Antonio Ávila, el programa tiene como objetivo generar distintas medidas a corto y mediano plazo, de modo que el problema no solo de aborde desde una perspectiva disciplinaria, sino que permita una intervención más profunda.
La violencia escolar, no cabe duda, es un fenómeno que viene golpeando a la educación hace muchos años. Sin embargo, el actual contexto social demanda, además de análisis, acciones oportunas, de modo que las soluciones se alcancen en un momento oportuno y no cuando ya queda poco y nada por hacer.
Junto a lo anterior es de gran importancia que en esta tarea también se involucren apoderados y familia como los primeros educadores. Hay que frenar la violencia.
"La violencia escolar, no cabe duda, es un fenómeno que viene golpeando a la educación hace muchos años".