Poca iluminación en el centro y borde costero preocupa a vecinos de Iquique
Juntas de vecinos realizaron un recorrido en el casco antiguo para ver los sectores más complicados y concluyeron que casi todos están críticos.
Postes apagados, luminaria pública con poco voltaje es el escenario que se impone en distintos sectores de Iquique, el cual, según los propios vecinos propicia una mayor sensación de inseguridad y el miedo para salir de sus casas.
El borde costero en el sur de Playa Brava lleva bastante tiempo oscuro, pero a eso, ahora se sumó la baja luminosidad en Cavancha, en la Plaza Prat y en casi todas las calles del centro de Iquique.
Esta situación preocupó a las juntas de vecinos del centro, quienes se unieron para realizar un recorrido nocturno y sacar conclusiones de cuáles son los lugares más críticos.
"Nosotros salimos a recorrer las calles con la Unión comunal de Tarapacá y concordamos que era urgente plantear el tema de la oscuridad, porque aquí el tema de la seguridad pública tiene varios factores externos, entre los cuales está la iluminación de la ciudad", dijo Hugo Marín, presidente de la junta de vecinos Central de Iquique.
El dirigente contó que se encontraron "una oscuridad tremenda", por ello planteó que "este es uno de los factores del por qué la gente no sale en la noche, porque en el fondo le están entregando a los delincuentes la ciudad y no anda gente justamente por lo mismo".
También comentó que ha tenido varios reclamos de vecinos cercanos al borde costero y a la Plaza Prat, debido a que, incluso esos lugares están poco iluminados, cosa impensada debido a su importancia turística. "La verdad es que no tengo explicación para eso, pero está muy oscuro el borde costero", dijo.
Silvia Prieto, presidenta de la Unión Comunal de Juntas Vecinales Tarapacá añadió que "la mayoría de los dirigentes encuentran que estamos con las luces muy bajas o algunas apagadas. Tienen que subir el voltaje".
De hecho, sostuvo que tienen "quejas por todos lados y de repente se apagan las luces y cuesta que vuelvan a dejar funcionando. Nosotros avisamos cuando los postes están apagados".
La dirigenta concordó con la sensación de inseguridad: "la mayoría de la gente tiene miedo, no quieren salir. Antes salíamos a cualquier hora, en la noche íbamos a comprar al Mercado, hoy día nadie va a comprar al Mercado en la noche. Además hay gente desconocida que anda caminando por el centro, hay robos, entonces la gente tiene miedo y queda la sensación de que nadie nos cuida acá en el centro".
En tanto, Hilda Burgos, presidenta de la Junta de Vecinos Tamarugal contó que en su sector también hay algunos lugares que la luminaria está apagada.
"Entre Playa Blanca y Chipana hay postes donde las luminarias están sin luz", dijo Burgos, aunque reconoció que en esa parte del sector sur aún no está tan presente la sensación de inseguridad.
"Estamos con las luces muy bajas y algunas apagadas en el centro
Silvia Prieto, presidenta de la Unión Comunal.
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