Patricio Iglesias P.

E n el sector de Colchane, en un terreno pedido a Bienes Nacionales, se construirá un campamento militar establecido por la Delegación Presidencial en el Tamarugal. El coronel Michael Woolvett Vila, segundo comandante de la Brigada Acorazada Cazadores, explicó que en el terreno señalado se instalará una base militar con capacidad para albergar a 36 personas, las que contarán con condiciones de seguridad, habitabilidad y alimentación.

"La base tendrá agua potable gracias a una planta de osmosis inversa, además de otra instalación para el tratamiento aguas servidas y contará con electricidad fotovoltaica. Es decir, es autosustentable y completamente funcional, pues estará 24/7 con capacidades propias", informó.

Esta nueva instalación se suma a la base de Cariquima, la que mantendrá su capacidad para 120 personas y está dotada de baños, comedor, habitaciones y hasta una enfermería. "El nuevo puesto será un punto de apoyo para poder mantener de mejor forma nuestra operación en Colchane, lo que permitirá efectuar un relevo más constante y mejorar la cooperación con Carabineros y PDI, a quienes apoyamos con transporte, comunicaciones y tecnología", indicó el oficial Woolvett.

La estructura será parte de los equipamientos que dispondrán las Fuerzas Armadas en el marco de la aprobación de la Ley de Infraestructura Crítica y que prevé, vía decreto fuerza de ley (DFL) presidencial, que estas asuman labores y medidas preventivas en la frontera en la macrozona norte, con las facultades de poder detener personas, revisar vehículos y también registro de personas migrantes.

Si bien se debe elaborar aún un protocolo, la senadora (UDI) Luz Ebensperger, destacó que hay gestiones que debe materializar el ejecutivo y la ley se publique en el Diario Oficial: "hay que esperar que el gobierno dicte el DFL que regulará el procedimiento por el cual las Fuerzas Armadas deben ejercer las facultades que le entrega la constitución de hacer control identidad, registro y detención que se establecen en la reforma, para lo cual tienen 3 meses, espero lo saquen antes. Hecho eso, el Presidente debe decretar el utilizar esta facultad y desde ahí podría operar en la frontera Colchane", indicó.

El diputado Renzo Trisotti expuso que "a falta del estado de excepción bueno es el proyecto de infraestructura crítica que luego de ser mejorado en la comisión mixta y aprobado por ambas cámaras, permitirá la presencia militar con nuevas facultades para la detención, control de identidad y registro que antes carecían y con una protección a las Fuerzas Armadas mucho mayor".

Frente a este tema, el diputado (PC), Matías Ramírez, expuso que "lo que se ha conversado con Interior es que se dispondrá de manera inmediata personal militar en la zona fronteriza. Queda ver la cantidad de personal que se requiere en ese sector. "Hay que recordar que con el decreto 265 ya se encontraba personal de las Fuerzas Armadas en la frontera haciendo custodia". Indicó que tampoco hay fechas para cuándo regirá la iniciativa legal.

La aplicación de la ley infraestructura crítica podrá regir por un plazo máximo de 90 días, pudiendo ser prolongada con apoyo del Congreso. En la frontera las FFAA podrán hacer controles de identidad y registros en zona fronterizas delimitadas vía decreto y detener personas para ponerlas a disposición de las policías.