Un proceso que no se puede desperdiciar
El interés por conocer a los candidatos al Consejo Constitucional, que se eligen el próximo 7 de mayo, sigue en niveles preocupantes y esto queda demostrado en los últimos estudios de opinión que han medido el sentir ciudadano con la próxima elección.
Al parecer, poco queda de aquella efervescencia que llevó a casi un 80% de los electores chilenos a votar a favor de redactar una nueva Carta Magna. Hoy se nota apatía, cansancio con procesos eleccionarios y resignación ante una posibilidad perdida.
Las atribuciones que tendrán los futuros consejeros constitucionales no logran convencer, más si a ello se suma un acuerdo político que definió las bases constitucionales y una comisión experta que está redactando la columna vertebral del nuevo texto.
Aunque se habla que el alma y el corazón quedará para los consejeros, hay poca confianza respecto al campo de acción en el que se moverán entre las 12 bases o bordes y el proyecto de los expertos.
Son aspectos que están pesando y que se reflejan en el poco interés y en un desgano que puede restar legitimidad a una elección que es de suma importancia.
No se debe ver como una oportunidad perdida, sino como una vigente y que puede convertirse en un instrumento que sostenga el desarrollo del país. Contar con una constitución actualizada, moderna y que responda a los cambios que se suceden vertiginosamente en el mundo, tiene ese valor intrínseco.
La vigencia del voto obligatorio y la franja televisiva abren esperanzas en que pronto llegará un despertar electoral y el interés irá creciendo. Lamentablemente, estamos en cuenta regresiva y existe poca amplitud para que exista un giro positivo.
El llamado siempre será a votar informado, conocer a los pactos y sus candidatos; saber sobre sus posturas y cómo planean aportar para entregar los lineamientos constitucionales a un país en que existan mayores derechos sociales y más felicidad en los hogares.
Con esos antecedentes acudir a las urnas y votar informado. No olvidar que es un deber cívico y se debe hacer con el debido respeto.
"El llamado siempre será a votar informado, conocer a los pactos y sus candidatos; saber sobre sus posturas".