Mauricio Torres Paredes

Asociaciones de empresarios gastronómicos manifestaron su preocupación ante la presencia de venta informal de comida en las inmediaciones de Cavancha, sobre todo ahora que se acerca el verano.

El gerente de la Asociación Gastronómica de Tarapacá, Juan Carlos Cofré, detalló que en el gremio hay "impotencia", porque pagan impuestos, permisos y contratos laborales, pero no pueden vender de forma normal por la pandemia, debiendo enfrentar la venta informal.

"Muchos asociados han manifestado su molestia porque nos restringen la atención a público y se producen estas paradojas. El comercio ambulante va a existir siempre, porque las personas tratan de generar sus ingresos y no lo voy a criticar desde esa perspectiva, pero hay un desmedro enorme hacia los establecidos. Los restoranes llevan ocho meses sin abrir y las pérdidas son grandes, pero se dan las condiciones para que se produzca este desorden y esta proliferación", expresó Cofré.

Óscar Morano, presidente del gremio que representa a los restoranes de Península Cavancha, aclaró que la necesidad de las personas es entendible, sobre todo con la pandemia, pero indicó que la molestia tiene relación con que todos los días se fiscalizan las medidas sanitarias de los restoranes, a diferencia de lo que ocurre con los ambulantes.

"Uno se pregunta, qué pasa con estos carritos en Cavancha, por qué no hay ninguna fiscalización, ni resolución sanitaria. Nosotros tenemos certificaciones para funcionar, tomamos medidas de sanitización, entonces hay molestia por esta aglomeración de carritos", dijo.

AUTORIDADes

El seremi de Salud, Manuel Fernández, advirtió que la autoridad sanitaria ha sido insistente en el alto riesgo que significa consumir alimentos en la vía pública, sobre todo en la venta clandestina, donde se desconoce cómo se elaboran y manipulan.

De hecho, y aunque ha sido un asunto de todos los veranos debido a las enfermedades que pueden generar estos alimentos, durante la contingencia del COVID el protocolo de "Playa segura" recomienda evitar ingerir alimentos en locales informales.

"Como se ha señalado en reiteradas ocasiones, la administración de la venta en la vía pública es materia comunal, por lo tanto, debe ser abordada por los administradores del territorio, junto a Carabineros, ya que se requiere un permiso municipal para autorizar la venta de cualquier tipo de producto, especialmente si son alimentos", señaló Fernández.

Consultado, el alcalde de Iquique, Mauricio Soria, expresó que para poder requisar los carros de venta informal de comida se deben coordinar operativos con Carabineros, ya que los inspectores municipales no tienen la facultad para hacerlo. Además, afirmó que estos carros, como los llamados "carros de completos", no tienen ningún tipo de permiso de la municipalidad.

"El jefe de inspección se reunió con Carabineros para trabajar de forma conjunta. Espero que se pueda disponer de contingente policial para trabajar en el retiro de estos carritos de completos que sanitariamente no cumplen con nada y pueden ser un foco de infección. Obviamente no pueden funcionar", comentó Soria.

El alcalde precisó que en el paseo Cavancha hay vendedores autorizados, pero manifestó su preocupación por las aglomeraciones que genera el comercio informal, sobre todo tras la proyección de la nueva ciclovía que redujo el paseo a la mitad. Espera una entrega parcial del nuevo paseo peatonal en la ex ciclovía a inicios de la próxima semana.

"Uno se pregunta, qué pasa con estos carritos, por qué no hay fiscalización.

Óscar Morano.

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